La Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER) confía en que la Cámara de Diputados dará media sanción a un proyecto de ley unificado entre el oficialismo y la oposición que será discutido hoy en el recinto y que autoriza la inyección de energía limpia a la red de distribución eléctrica por parte de usuarios residenciales, comerciales e industriales.
Luego de un arduo debate, el proyecto de ley obtuvo el visto bueno en la Comisión de Energía y Combustibles y de “Presupuesto y Hacienda”, lo que permitió que hoy sea estudiado por el cuerpo de diputados para obtener media sanción. Luego, pasaría al Senado, para su aprobación definitiva.
“Apoyamos y acompaños esta ley que permitirá un cambio de paradigma en el sector energético”, destacó Marcelo Álvarez, presidente de CADER, quien participó del proceso de discusión del texto desde un comienzo en conjunto con otros subsectores de la energía.
Lo interesante, valora el empresario, es que fue consensuado entre por todo el colectivo de actores involucrados: distribuidoras, cooperativas eléctricas, empresas de servicios, fuerzas políticas nacionales y provinciales de la oposición y el oficialismo. “Esperamos que hoy sea aprobado en Diputados y pueda convertirse en ley este año”, se entusiasmó.
En concreto, el marco regulatorio habilita a los usuarios particulares inyectar la energía eléctrica excedente que obtengan de la producción de equipos de energías renovables como paneles solares, biodigestores, turbinas hidroeléctricas o aerogeneradores de baja potencia, en todo el territorio nacional.
De aprobarse, el dirigente destaca que “se crearán miles de puestos de trabajo en todas las provincias”, por el surgimiento de empresas abocadas a la instalación de equipos y de servicios, la radicación de fabricantes y distribuidores locales, entre otros proveedores que conforman la cadena de valor industrial.
“Estamos entusiasmados con esta nueva oportunidad que se abre para el país, por eso esperamos que el Congreso acelere el tratamiento legislativo para que pueda convertirse en ley este año”, explicó el empresario.
Desde el punto de vista económico, Álvarez subrayó que “para los usuarios será una gran oportunidad”, dado que en muchos casos podrán reducir el costo del consumo eléctrico.
A nivel macro-económico, Álvarez planteó que “el Estado se podría ahorrar grandes sumas de dinero evitando la importación de combustibles fósiles que se utilizan para la generación térmica distribuida”. La generación distribuida mediante renovables señala que “ya es más barata” que utilizar gasoil importado con el mismo fin.
Por eso, planteó que “es necesario instrumentar un esquema normativo que estimule a los usuarios la utilización de energía limpia”.
Con planes de financiamiento para adquirir las tecnologías y tarifas promocionales, asegura que “sería muy atractivo” convertirse en “prosumidor”.
El proyecto de ley fue consensuado a lo largo del año por diputados de diversas fuerzas políticas: Juan Carlos Villalonga (Cambiemos), Luis Bardeggia (Frente Para la Victoria), Néstor Tomassi (Bloque Justicialista) , Gustavo Bevilacqua, del bloque Federal Unidos por una Nueva Argentina, y Jorge Taboada diputado de Chubut Somos Todos.